Para identificar la especie a la que corresponde de animal, en este caso un mamífero marino, los Zoólogos utilizan unas herramientas denominadas "Claves Taxonómicas de Identificación Zoológica".

Existen de varios tipos, siendo las "pictóricas" las más conocidas y populares entre los aficicionados, porque son las más estéticas y simples de utilizar. Estas, están basadas en el uso de dibujos que destacan las particularidades de una especie. El problema que tienen es que no siempre los animales permiten ser observados en una forma que permita compararlo con el esquema, tanto detalle o son demasiado numerosos como para comparar muchos dibujos uno por uno. Además, frecuentemente los animales presentan diferencias individuales, por lo que es el biólogo zoólogo con conocimientos en Taxonomía y Sistemática, el que está capacitado para interpretar cuales son los caracteres que son útiles y cuales no.

El Taxónomo, utiliza claves del tipo "dicotómicas", que son muy poco estéticas pero presentan el nivel técnico que se necesita para diferenciar formas de vida que son muy semejantes. Las claves dicotómicas, están basadas en preguntas sobre la presencia de una cierta característica y que dependiendo de la respuesta positiva o negativa, se avanza desde niveles de clasificación altos hacia los más bajos lleganos a la Especie e incluso sub-especie.

A diferencia las claves pictóricas, las dicotómicas están construidas en base a caracteres que los animales presentan no sólo en vida, sino también en sus restos cuando han muerto. Por ejemplo, las claves de identificación en base a las dimensiones de los huesos que componen el cráneo.

Con el tiempo y experiencia, los zoólogos académicamente entrenados, logran identificar a las especies pese a la distancia, estado de descomposición, fragmento del material, etc.
Sin embargo, al momento de publicar sus trabajos, siempre declaran con detalle el criterio que se emplearon para identificar la especie de los animales que han estudiado.